Mito l: Las escuelas deber’an subrayar la competici—n porque estamos en un mundo en el que el pez gordo se come al chico. No es cierto. Por el contrario, estamos en un mundo en el que la gente ayuda a los dem‡s. Si nos fijamos con atenci—n, veremos que la mayor’a de las actividades humanas son actividades cooperativas. Trabajamos en un sistema econ—mico caracterizado por una elaborada divisi—n del trabajo. Para que funcione bien cualquier sistema social (familia, empresa, escuela, etc.) es absolutamente necesaria la coordinaci—n de las acciones de muchos individuos para alcanzar metas mutuas. Y es que vivimos en un mundo interdependiente. Si las jirafas han podido sobrevivir debido a su largo cuello, el hombre ha sobrevivido a causa de su capacidad de cooperar para conseguir metas mutuas. Por tanto, para hacer la vida escolar m‡s realista, en las aulas deber’an predominar las actividades de aprendizaje cooperativo.Ê